miércoles, 27 de mayo de 2015

Municipales y autonómicas 2015: el Consenso sigue mandando

Otra cita electoral más de este año lleno de urnas, papeletas, mentiras y tópicos. Esta vez era el turno de las municipales y autonómicas (menos en las Comunidades Autónomas de Galicia, País Vasco, Cataluña y Andalucía). Estas elecciones no han dejado indiferente a nadie, si bien algunos resultados se esperaban.

En la Comunidad de Madrid ha ganado Cristina Cifuentes (PP) con 48 diputados, seguida de Ángel Gabilondo (PSOE) con 37, José Manuel López (Podemos) con 27 e Ignacio Aguado (C’s) con 17. A la hora de hablar de pactos todo parece indicar que la Comunidad de Madrid (si Ciudadanos no acepta pactar con el PP) será gobernada en alianza PSOE-Podemos, pese al discurso anti-casta de éstos, a la hora de tocar poder no hay casta que valga si te ayudan en tu objetivo de someter a la población bajo ideas totalitarias como son las del partido de los círculos, y no menos en los de la rosa. Nada nuevo.

En el Ayuntamiento de Madrid más de lo mismo. Esperanza Aguirre (PP) ha ganado las elecciones con 21 concejales, por delante de Manuela Carmena (Ahora Madrid) que ha conseguido 20, Antonio Miguel Carmona (PSOE) que se queda en 9, pese a decir tonterías varías en la campaña y mucho antes, como que en las encuestas que manejaban en el PSOE madrileño iban a ganar con mayoría absoluta en el Ayuntamiento. Je, no ha colado. Por último, Begoña Villacís (C’s) ha conseguido 7 ediles. IU y UPYD ni están ni se les espera, tanto en la Comunidad como en el Ayuntamiento de Madrid. Todo parece indicar que habrá pacto Ahora Madrid-PSOE, para lograr la mayoría absoluta en el Consistorio madrileño, que está en 29 concejales, justo la suma de estos dos partidos. Por cierto, tiene guasa que una candidatura (de Podemos, por mucho que Carmena diga que no) se llame Ahora Madrid. ¿Ahora? Las ideas de partidos como éstos no son precisamente de ahora, ni para ahora, sino más bien de siglos pasados que nada tenemos que celebrar los españoles, en cuanto a totalitarismo y falta de libertades se refiere. Pero la educación pública de este país ha hecho mucho daño, haciendo ver algunas ideas como buenas, por el “pueblo”, y otras no tardan en calificarlas como “fascistas”, “neoliberales”, “exprimidores de lo público”, etc., demostrando una gran ignorancia política e histórica. Nada nuevo tampoco.

¿Hablamos de Barcelona? Pues más de lo mismo. Ha ganado una candidatura de “unidad popular”, dos palabras que solo sirven (tanto en Madrid con Ahora Madrid como en Barcelona con Barcelona en Común) para proteger la verdadera esencia que se esconde en estos movimientos, programas basados en mentiras, haciendo creer a sus votantes y demás ciudadanos que más intervencionismo es mayor bienestar. Sin duda se la han “colau” a muchos en la ciudad condal y en la capital.

PP: tocado y hundido

Las encuestas acertaron, en su medida, con el fracaso del PP en estas elecciones. Seguramente se pierda Madrid (tanto Ayuntamiento como Comunidad) con pactos Podemos-PSOE. Posiblemente se pierda Castilla La Mancha, tras quedarse Cospedal a 1 diputado de la mayoría absoluta. También es probable que se pierda la Comunidad Valenciana, con un pacto tripartito  entre PSOE, Podemos y Compromís. El PP no alcanzaría la mayoría absoluta ni pactando con Ciudadanos, pues se quedarían en 44 diputados, cuando dicha mayoría absoluta está en 50 diputados en el parlamento valenciano.

El Partido Popular no ha conseguido ninguna mayoría absoluta en las Autonómicas. Ha perdido cerca de 2.5 millones de votos respecto a 2011 y se queda a tan solo 2 puntos del PSOE. Dejar las ideas a la deriva, mentir al electorado, hacer lo que te da la gana sin compromiso, sustituir la política por economía; todo eso se paga, y en estas elecciones se ha visto. De cara a las generales habrá que ver si funciona eso del miedo a Podemos, yo no lo tengo tan claro. El votante del PP (y el que siempre ha votado al PP y ahora vota otras opciones) está hasta las narices, tanto de Rajoy como de todos los que le rodean. Y es que Mariano ha dado una magistral lección de cómo cargarse un país y un partido en menos de una legislatura. Para que luego digan de Zapatero…

Lo peor es que no hay una alternativa seria al PP. Me acuerdo de Vox, pero este partido no es una alternativa seria, por mucho que sus ideas me gusten o me dejen de gustar, fallan demasiado, y eso se nota con tres fracasos electorales. ¿Camino del cuarto en las generales? No tengo dudas. Y los liberales ni nos acercamos por todo aquello que tenga que ver con Rajoy, Montoro y demás tropa socialdemócrata.

Valdemoro, otro batacazo del PP

Pensaba que en Valdemoro ganaría otra vez, aunque sin mayoría absoluta, el PP. Le daba entre 8 y 9 concejales. Pero saltó la gran sorpresa de la noche en las municipales de mi zona. Ciudadanos ganaba las elecciones en Valdemoro (unas elecciones con más de 15.000 abstenciones, algo habitual), con 6 concejales, por 5 que conseguían PP y PSOE. Batacazo sin remedio de los populares. La Púnica pasó la factura en el día electoral. Y lo que no es la Púnica, también.

El PSOE no tiene nada que hacer en Valdemoro. Se ha demostrado que los valdemoreños no quieren un alcalde socialista (y menos mal). Por detrás de ellos quedaba Ganemos con 4 concejales, TUD con 3 (triplicando el resultado de 2011) e IU con 2 (le robaba en los últimos votos contados el quinto concejal a Ganemos). Sin rastro de UPYD y el PIVV, que perdieron su concejal como consecuencia del auge de Ciudadanos, Ganemos y TUD.

Todo parece indicar que el próximo alcalde de Valdemoro será Guillermo Gross, el candidato de Ciudadanos, ya que no parece factible ningún pacto que aleje esa posibilidad. La mayoría absoluta son 13 concejales y es una quimera que un pacto alejara a Ciudadanos de la alcaldía valdemoreña, tantos años ocupada por el PP y pésimos alcaldes, como ya he dicho alguna que otra vez, como Granados o José Carlos Boza.

Eso sí, ahora tienen que demostrar que valen, que los valdemoreños que les hayan votado no se equivocan. Es más fácil ganar unas elecciones que hacerlo bien los 4 años siguientes en un Ayuntamiento. Esto no es como un sorteo de lotería donde te toca un premio, lo celebras y ya está. No. Aquí ganas el “premio”, lo celebras y al día siguiente hay que ponerse manos a la obra. Es el comienzo de un largo camino, muy largo.

El Consenso sigue en auge

La principal conclusión de estos comicios no puede ser otra: el Consenso del pensamiento único, el Consenso Socialdemócrata sigue mandando -y creciendo- en España. Gran culpa de esto lo tiene el sistema electoral, que los políticos no quieren tocar, que no deja que los votantes elijamos de verdad a nuestros representantes mediante listas desbloqueadas.

Pero también es culpa de aquellos que se han vendido por un puñado de votos a posiciones políticas contrarias, como es el caso de Rajoy y compañía. No se dan cuenta de que la gente que quiera votar a la izquierda ya tiene partidos (y muchos), no tiene que venir el PP a abrazar ideas socialistas. 

Hay multitud de partidos que abrazan dicho Consenso. No hay ni uno solo que lo rechace que tenga opciones de devolver la libertad a los ciudadanos (sí hay partidos que rechacen dicho Consenso, pero no tienen opciones de gobernar, porque el mismo Consenso lo impide). El pensamiento único de aumentar impuestos para “redistribuir la riqueza”, proteger el Estado de Bienestar, no dejar cabida a la innovación, estar encajado en el pasado. Eso es lo que manda en España, da igual el partido. Y en vez de ver cerca la salida de estos túneles, parece que estamos más a la entrada que nunca y queda todavía un largo trecho para salir de laberintos oscuros “consensuados”. Ya lo decía Ludwig Von Mises: “No hay esperanza mientras las masas estén a favor de políticas nocivas”; y es que no hay nada más nocivo y perjudicial que el Consenso y el pensamiento único impuesto por ellos. Lo dicho, el Consenso sigue mandando. 

sábado, 16 de mayo de 2015

Ciudadanos, externalizaciones y privatizaciones

Hace unos días se conocía la intención del partido político Ciudadanos de “desprivatizar” cuatro hospitales en la Comunidad de Madrid. Estos hospitales, privados según la formación que preside Albert Rivera, serían los siguientes: Valdemoro, Torrejón de Ardoz, Móstoles y Collado Villalba.

El primer fallo es considerar estos cuatro hospitales como privados. Ciudadanos, al igual que muchos otros, confunde externalización con privatización. Los hospitales citados son públicos de gestión privada, es decir, han sido externalizados. La externalización consiste en traspasar la gestión del servicio, en su totalidad o sólo alguna de sus fases, bien a empresas privadas bien a organizaciones sin ánimo de lucro, aunque la titularidad y responsabilidad del servicio continúan siendo de carácter público. La privatización, por su parte, consiste en pasar tanto la gestión como la titularidad del servicio desde el sector público al sector privado.

Siguiendo con este tema, el pasado martes 5 de mayo se pronunciaba el Tribunal Constitucional sobre la externalización sanitaria que la Comunidad de Madrid, gobernada por el PP, propuso en el año 2012. El Alto Tribunal ha dado la razón por unanimidad al Gobierno madrileño diciendo que la gestión privada no pone en riesgo el régimen público sanitario. Es decir, el ejecutivo madrileño actuaba bajo la legalidad, a pesar de los intentos de desprestigio y las mentiras de la izquierda y actores sociales contrarios a la privatización de la sanidad -otros que confunden externalización con privatización-.


El principal argumento de aquellos que defienden un modelo público -tanto en sanidad como en educación y demás sectores- es que todo aquello que provee el Estado es gratuito para sus usuarios. Así, no dudan en utilizar la falsa coletilla de “sanidad gratuita” o “educación gratuita”.

¿Es gratuito lo público? Ni mucho menos. Todo aquello que es público se financia con tributos -impuestos, tasas y precios públicos- además de la deuda pública. Los impuestos los pagamos todos y han ido aumentando en los últimos años bajo los gobiernos de Zapatero y Rajoy, hasta llegar al punto en el que nos encontramos actualmente: “la dictadura de los impuestos”. Prueba de ello es que 2014 ha sido el año en el que más impuestos se han pagado en España.

La sanidad pública no es gratuita. Las Comunidades Autónomas, que son las que tienen la competencia del gasto en sanidad, han ido aumentando el gasto desde que comenzara la crisis, negando así la austeridad y los recortes, un mito que no se cumple, por más que algunos sigan insistiendo. El gasto anual en sanidad ha aumentado desde el 5.7% del PIB en el año 2007 al 6% del PIB en 2013, del cual el 45% corresponde a la remuneración del personal. Es decir, el gasto ha aumentado algo más de 3.000 millones de euros desde que comenzara la crisis económica. Austeridad, recortes y mentiras.

Por cierto, Andalucía es la que menos gasta en sanidad pública per cápita: 1.044 euros. ¿Han visto protestas de la marea blanca por el sur de España? Yo tampoco, lo que indica que dicha marea solo “lucha” por los “derechos de todos” en aquellas comunidades donde gobierne el PP. Allí donde gobiernen los amiguitos socialistas de la marea blanca, ni pío.

Como he dicho antes, privatizar no consiste en externalizar solo la gestión, como algunos confunden a menudo. Privatizar tampoco es lo que se conoce como “capitalismo de amiguetes”. Cuando se privatiza algo, se debe hacer con la idea de devolver una actividad económica a la sociedad civil, esto es, desregular y sacar del presupuesto público dicha actividad. Permitir que sean empresarios -y no políticos o burócratas- quienes establezcan sus propias escuelas en el caso de la educación u hospitales, ambulatorios, etc., en el caso de la sanidad. De este modo se rebajan drásticamente los impuestos para que todas las personas puedan acceder a estos servicios. Sí, todas las personas. Algunos de los que rechazan la sanidad o educación privada dicen que solo aquellos que disfruten de rentas altas pueden tener acceso a dichos servicios privados. Falso. Hay mecanismos para aquellas personas con rentas más bajas, como el cheque escolar -también el homeschooling, rechazado por todos aquellos políticos que no soportan la libertad, ni tan siquiera la de elegir la enseñanza y educación de los padres hacia sus hijos- o el cheque sanitario. Todas las personas tendrían acceso a una sanidad o educación privada, al igual que no hace falta nacionalizar los supermercados para que todos tengan acceso a una alimentación básica, la cual también es un derecho y no veo a nadie diciendo que los supermercados tengan que ser públicos (estatales) y gratuitos, como sí lo dicen de la sanidad y la educación.

Externalizar no es privatizar, que se enteren en Ciudadanos y aquellos que no hacen más que confundir ambas ideas. Tampoco hay que demonizar la provisión y producción privada de bienes y servicios. El capitalismo de libre mercado es algo muy diferente a lo que suelen caricaturizar algunos que están en contra de dicho sistema: un señor en traje con un maletín lleno de billetes. No han entendido nada. Ese dibujo se identificaría más con el Estado del Bienestar, mejor llamarlo bienestar del Estado -de sus políticos y burócratas-. El libre mercado nada tiene que ver con ganar y ganar dinero, sino en prestar el mejor servicio posible a la sociedad. Si no se lo das, se irán a otro lado a buscarlo. Muy fácil de entender, pero no para todos, desgraciadamente.